5 claves para elegir y usar la piedra para asar carne, según Alfarería Raimundo

/COMUNICAE/

Elegir bien la piedra para asar carne contribuirá a disfrutar de una buena comida alrededor de la mesa con la familia o con los amigos, puesto que de ello dependerá si la carne está bien hecha o no

Las reuniones alrededor de la mesa han sido desde tiempos pasados una buena forma de mantener las relaciones entre seres amados. Los anfitriones siempre han buscado formas de agradar y sorprender a los comensales, y una de las formas que se puede hacer hoy en día es con la piedra para asar carne. En Alfarería Raimundo Sánchez, expertos alfareros ubicados en Valdetorres de Jarama (Madrid) disponen en su página web de piedras de asar de diferentes tamaños, además del conjunto de soporte con quemadores de alcohol.

Alfarería Raimundo expone las 5 claves que harán que la carne cocinada en la piedra sea del mejor de los sabores, además explica también cómo cuidar la piedra para conseguir una larga durabilidad.

5 claves para elegir y usar la piedra para asar carne

Elección del tamaño. Porque el tamaño sí importa a la hora de cocinar. Se debe tener en cuenta el número de comensales, para que esta no se quede pequeña. Los tamaños más grandes, por ejemplo de 32 x 22 centímetros, se usan en las cocinas, en barbacoas y hornos. En cambio, las de menor tamaño, o 25 x2 2 centímetros, se usan para llevar a la mesa.

Material de fabricación de la piedra. En el mercado se pueden encontrar diferentes materiales, como pueden ser la piedra volcánica, el gres, el mármol o el hierro fundido. Sin ninguna duda, la mejor opción son las piedras de asar carne volcánicas, por su naturaleza, ya que absorbe y distribuye perfectamente el calor, además de ser muy resistente y tener una gran durabilidad. La diferencia entre la piedra de gres y la volcánica es que la de gres es para su uso en fuego directo, y la volcánica es para su precalentamiento en horno.

Usar la piedra con el conjunto de quemadores o no. Para usar la piedra en la mesa sin los quemadores se debe tener en cuenta que esta dura caliente unos 20 minutos, con lo que se dispone de ese tiempo para cocinar la carne. En los restaurantes suelen cambiar la piedra pasado ese tiempo, pero en los hogares es práctico disponer de los quemadores de gas o alcohol que garantizarán que la temperatura será siempre óptima para tener una buena cocción de la carne. En los quemadores si se puede poner gel de quemar en lugar de alcohol, mucho mejor, ya que este último es más peligroso por su estado líquido. En Alfarería Raimundo recomiendan siempre el uso del gel, ya que los mecheros son mixtos y valen para ambas opciones.

Calentar la piedra. No es aconsejable calentar la piedra de forma directa al fuego o en vitrocerámica, ya que el calor no se distribuirá por ella de forma homogénea. La forma más aconsejable y que consigue mejores resultados, es hacerlo en el horno a máxima temperatura durante 30-40 minutos. Si se dispone de calentadores de gas, lo ideal es precalentar la piedra antes, para agilizar el proceso. Hay que tener en cuenta que los calentadores de alcohol no están pensados para calentar la piedra sino que su función es la de mantener la temperatura durante más tiempo.

Mantenimiento de la piedra. Para que la piedra de asar carne dure mucho más tiempo es importante tener en cuenta una serie de requisitos:

Nunca enfriar la piedra rápidamente, mojándola o de cualquier otra manera, ya que se podría romper.

Limpiar la piedra a temperatura ambiente, nunca caliente.

Restregar con un estropajo de aluminio bajo el grifo, no es necesario el uso de detergentes.

Para que la carne no se pegue, se puede dejar un paño empapado con aceite durante 24 horas para que se cree una fina capa antiadherente en la superficie.

Descubrir formas distintas de comer hace que disfrutemos de los sabores y los redescubramos a cada bocado. Alfarería Raimundo brinda la oportunidad de re-descubrirlos gracias a todo su abanico de productos fabricados en barro, productos típicos fabricados con materias primas nobles, que revocan orígenes pasados, como son los botijos, los platos, las ollas, cazuelas, y las piedras de asar carne.

Fuente Comunicae

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *